16.2.12

Transpirar

"Está pesado el día", afirma el recepcionista del hotel. Este jueves 16 de febrero soportamos 36 grados centígrados en Asunción. Todo apunta a que en unas horas estallará una de las habituales tormentas de verano. En la terraza del restaurante del microcentro donde comemos, un ventilador con aspersor de vapor de agua ayuda a soportar este calor húmedo que machaca a todo ser viviente. En la Plaza Uruguaya la solución pasa por el tereré y la sombra, además de los bancos que se convierten a mediodía en improvisado lugar para tumbarse y, quizá, dormitar. La ropa se pega al cuerpo en el momento en que se sale a la calle desde cualquier lugar en donde funcione el aire acondicionado. Los paraguayos dicen que, en estas condiciones, "transpiran". El verbo elegido, con su delicadeza, no expresa realmente lo que es sudar en Asunción en pleno verano. 

1 comentario:

Merche dijo...

¿Qué le pasa al autor de este blog? me está preocupando. Necesito un buen trozo de texto que llevarme a la boca...
Un abrazo