Silvio

Empapados. Después de días sin lluvia y temperaturas más amigables, el sábado asunceno decide regalar agua en abundancia justo para el recital de Silvio Rodríguez. El cantautor cubano actúa por primera vez en Paraguay y lo hace por invitación del presidente Fernando Lugo. Tomo la línea 23 para llegar hasta Eusebio Ayala y bajar caminando por Oliva a la catedral para alcanzar el Palacio de López por la plaza del Congreso, mientras escucho de fondo 'Una mujer con sombrero'. La explanada de la fachada frontal —actualmente trasera— de la sede de Gobierno es el lugar elegido para el espectáculo. Miento al vigilante que controla el acceso y le aseguro que no utilizaré mi vídeocámara. No está permitido grabar, pero los teléfonos y cámaras están por todas partes. Después del diluvio de las dos de la tarde, que nos sorprende en pleno almuerzo en la terraza —cubierta— del Bolsi, ha escampado, pero no será por mucho tiempo. No ha tocado 'Ojalá' cuando comienza a diluviar. Se despeja de nuevo y vuelve a llover con ganas. La gente no está por la labor de marcharse. Bises y despedida. Antes de salir hacia Guayaquil, Silvio no deja pasar la oportunidad para defender la Cuba revolucionaria. Veremos…