20.4.06

Tristeza en La Comuna


La Comuna es una barriada obrera situada en una de las zonas altas de Quito. Para subir es imprescindible un vehículo porque la pendiente es muy pronunciada. A ello se une el miedo que invade a parte de los habitantes de la ciudad, empeñados en ver inseguridad en donde sólo hay pobreza. La gentes de la barriada son amables, pero en algunos niños, como lo de la foto, se dibuja un gesto de tristeza infinita. Las mujeres se revelaron anoche como las más combativas. Los candidatos presidenciales en Ecuador -como en todas partes- sólo visitan estos lugares en campaña -o precampaña- y las mujeres se quejan por ello y exigen que se pongan de verdad soluciones, que se les proporcionen condiciones de vida dignas -"estamos en el centro de Quito y vivimos como en el campo"- y que cese la corrupción política. Ojalá se haga realidad...

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Todavía tenemos que ir a verte también a Ecuador, pero para sacarte de la cárcel, porque si un país ofrece la posibilidad de defender causas perdidas, sin duda, es éste. Estuve leyendo una publicación de los misioneros vascos en Ecuador (no sólo, pero básicamente en Ecuador) y tú eres lo más parecido a un misionero, aunque sea de lo social, como dijo Matilde Fernández. Así que ten cuidado que ya te veo abrazando la defensa de la selva amazónica, peleando por la ocupación de las tierras no productivas etc, etc. También vimos, por cierto, al de poco de irte, un documental de una periodista canadiense sobre la dudosa contribución de una multinacional de su país (petrolera, creo)a la preservación del medio ambiente en Ecuador. Como ves, tu viaje nos ha estimulado mucho para adquirir más conocimientos sobre tu país de destino. Ya no me enrollo más. Me encantaría estar en tu lugar. Me conformaré con este blog. Un abrazo fuerte.

Anónimo dijo...

Desde el enterprise, con los sensores de alto alcance activados, observo, amigo Jose que aún te mueves, junto con Merche en el bonito mundo de lo ideal. La lógica y la experiencia adquirida en tus anteriores aventuras, deberian dictarte un camino hacia la realidad en la que te desenvuelves.
El consejo que la lógica dicta en este momento es ser prudente, y en ningún caso unirte a la lucha de nadie, ya que ahi eres un mero observador.
Quizás esto entre en conflicto con tus sentimientos, pero incumplir la primera directiva (NO INTERFERIR EN EL DESARROLLO DE OTRAS CULTURAS)a menudo puede traer graves problemas.
Sé lógico. Piensa cual es tu cometido, y llevalo a cabo.

Larga vida y prosperidad.

Anónimo dijo...

el consejo de Merche es adecuado. dejate guiar por el.

Mis saludos a Merche, pues parece que la lógica es su guía.

Larga vida y prosperidad.

Anónimo dijo...

El día que utilices la lógica y dejes de ser idealista, preocúpate. Habrás muerto...

Anónimo dijo...

Una de las prerrogativas de los idealistas es que pueden permitirse el lujo de ser lógicos sin tener que dar cuenta a sí mismos de cuándo lo son o cuando dejan de serlo. Además, querida Nahia, no creo que la lógica esté reñida con el idealismo, es más, creo puede ponerse a su servicio. Aprovecho para saluda a t'pol y espero que comparta también esta idea. Un abrazo a los que escribís aquí y, por supuesto, a Jose.